Otra excelente alternativa que nos ofrece el Alt Urgell a la sombra es esta Baga Total, hoy en día toda una clásica VVB. Vista desde el aparcamiento casi se te quitan las ganas de escalar ante tanta verdura, algo así como la contraria cara sur. Marçel y Bonati tuvieron un ojo inusual o una suerte descomunal y la vía salío una verdadera virguería (a pesar de las apariencias). Apenas tocas matojos y la roca es excelente en todo momento, ofreciendo una escalada rápida y divertida sobre compactas placas de adherencia y algún muro sorprendente. Buenísima en su grado. El nombre le viene por una par de coincidencias: en esas fechas había prevista una huelga general y en la vía encontraron más de 70 puentes de roca (que equiparon con cordinos), un verdadero chollo aperturista. Está prácticamente equipada con toda clase de artilugios, típicos de las vías Millet. Todo un museo de la inventiva: puentes, paraboles, spits, clavos, clavos falcados con plomos y otras cosas, fisureros de diversa índole machacados. Los primeros tres largos y medio los subimos sin cuerdas y el resto más velozmente de lo que pueda parecer en la reseña, con Remi. No es muy fotogénica.