Esta bonita y tranquila zona cuenta con multitud de sectores, Repartidos a lo largo del río. Incomprensiblemente no ha cuajado entre el público y a penas a sido visitada. Fruto de ello es la proliferación de hierbas y pinchos y la imposibilidad actual de acceder a algunas de sus paredes. Creo que merecerían una segunda oportunidad, al menos para des-saturar otras pareces muchísimo más concurridas.
Excepción es el sector Final de Mediona (fotos) dónde se han reequipado y abierto un gran número de itinerarios y dónde se escalda con regularidad.
Al margen de este existe alguna novedad por dentro del barranco (no reflejada en esta edición de la guía) y algún sector en la otra parte del barranco, junto al molino, dónde aún podemos llegar a la base de sus vías, junto al coche. Que más queremos.